Tal vez... quizás... en una de esas...

Miles de preguntas que nos hacemos en nuestros pensamientos y nos rellenan los minutos, las horas y los días... sin respuestas...

El corazón ante la duda de nuestro discernir nos manda esos cimbronazos desesperados queriendo despertarnos y decirnos: no pienses tanto mira lo que estoy sintiendo.

Hoy día, fuera de mis ocupaciones cotidianas, no tengo otro pensamiento que no seas tú, y en ése pensamiento mil cosas, sí, mil cosas, y en todas ellas tú...

¿Estás bien?, ¿Eres feliz?, ¿Sonreíste hoy?, ¿Estás muy cansada?, ¿Algo te hizo llorar?.

Cuando leí por ahí que querías salir toda la noche a caminar, me imaginé que era debido a la gran soledad o a una sensación parecida a la que sentí yo misma cuando viví fuera de mi casa. Pero no puedo adivinar lo que pasa en tu interior, hablamos cada vez menos e incluso hay cosas que son imposibles de contar.

Yo te considero mi amiga, pero no sé si llego yo siquiera a la categoría de un buen contacto para tí.

Te extraño tanto a veces, no sé por qué siempre me pasa lo mismo contigo.
El calor en mis manos ahora mismo cuando escribo, el rubor en mi rostro recordando el color de tu ventana, la expectativa de si me respondes y si accedes a hablar conmigo, el quedarme sin palabras... una y otra vez...

No puedo decirte todo ésto en el msn... ya no, por eso me lanzo a la suerte que tal vez leas esta entrada.

Pequeña, no puedo hablarte y decirte lo que siento pues ante la pregunta de qué te ofrezco te respondería que nada tengo.

La distancia desvalija mis palabras, escarcha en el camino la llegada hasta tí de todo lo que yo siento...

Desearía... querría... me gustaría...

Me despojo de todas esas frases y te digo: Hola, cómo estás?

Me quedo sin palabras... y cuando ya el diálogo luego de varios minutos emula casi al de dos vecinas hablando de cosas comunes y a la vez externas a ellas te pregunto:¿Ya es muy tarde para tí, verdad?
Me respondes y callo...

Pequeña: "no sé tú, pero yo no dejo de pensar...
ni un minuto me logro despojar..."

No sé qué pase de aquí a unos meses, tampoco sabía hace unos atrás cómo estaría hoy.
Ni se me pasó por la cabeza encontrarme como ahora estoy...

Cada vez que no tuve compromisos mi corazón te buscó, es lo único que sé.

Pues bien , así estoy yo... sabes lo que pasa por mi cabeza, supongo, hasta donde me es lícito expresarme.
Sé que sabrás que te escribo a tí... lo que no sé es si tienes una respuesta para mí... pero la espero.

Que me llamen necia, tal vez 'loca' sería mejor definición, pero a pesar de lo que siento y ya no sé cómo gritártelo... fundo todo para no hacerte daño.

Recuerda al menos que... no, mejor dicho: 'hola, ¿cómo estás?